Mucho se ha escrito sobre el milagro de Januca.
algunos ponen el acento en el Aceite.
Otro en la Fe de los macabim,que encendieron la Menora aun sabiendo que el aceite duraria solo para un dia.
Hay otro milagro mas, que se menciona en las brajot que agregamos durante los dias de januca.
Se habla de los pocos que pudieron enfrentar a los Numerosos, los debiles contra los poderosos.
En oportunidad del encendido de la segunda vela de januca, fui testigo de ese milagro.
En el Condominio Carmel, en Vitacura fui invitado a la celebracion de Januca.
Alli gran parte de los residentes son de origen Europeo y de edad avanzada.
Despues del encendido de la janukia, con el acompaniamiento del Acordeon comenzamos a cantar Shirim de Januca y otros muy populares.
Los adultos mayores , acompaniaban con palmas y risas.
Dentro de ellos una mujer en particular que conocia hace algun tiempo, y que en la festividad de Sucot que lleno de emocion ya que corrio a tomar los Arbaat haminim e hizo la braja con verdadera kavana, comenzo a cantar y a bailar desde sus propio asiento.
Minutos antes la habia saludado y le comente a su hijo y a su nieta que estaba a su lado lo que habiamos vivido en Sucot.
Ahora ella cantaba con las mejores de las sonrisas.
Cantaba una cancion Hungara.
Alguien me conto su historia y su Nombre.
Era sobreviviente de Aushwitz.
Habia Escrito cuatro libros con su testimonio.
Su nombre es Judith Klein.
Ahora esa cancion ya no era solo una cancion.
Era el Mensaje del Milagro de Januca.
Unos pocos pudieron contra los numerosos.
Los debiles pudieron contra los poderosos.
Si Judith cantaba rodeada de su hijo y de su nieta, quiere decir que otra vez se produjo el Milagro.
Am Israel Jai, estamos aqui y seguimos cantando.
Nes Gadol Haia Sham, Nes gadol Haia Po.
algunos ponen el acento en el Aceite.
Otro en la Fe de los macabim,que encendieron la Menora aun sabiendo que el aceite duraria solo para un dia.
Hay otro milagro mas, que se menciona en las brajot que agregamos durante los dias de januca.
Se habla de los pocos que pudieron enfrentar a los Numerosos, los debiles contra los poderosos.
En oportunidad del encendido de la segunda vela de januca, fui testigo de ese milagro.
En el Condominio Carmel, en Vitacura fui invitado a la celebracion de Januca.
Alli gran parte de los residentes son de origen Europeo y de edad avanzada.
Despues del encendido de la janukia, con el acompaniamiento del Acordeon comenzamos a cantar Shirim de Januca y otros muy populares.
Los adultos mayores , acompaniaban con palmas y risas.
Dentro de ellos una mujer en particular que conocia hace algun tiempo, y que en la festividad de Sucot que lleno de emocion ya que corrio a tomar los Arbaat haminim e hizo la braja con verdadera kavana, comenzo a cantar y a bailar desde sus propio asiento.
Minutos antes la habia saludado y le comente a su hijo y a su nieta que estaba a su lado lo que habiamos vivido en Sucot.
Ahora ella cantaba con las mejores de las sonrisas.
Cantaba una cancion Hungara.
Alguien me conto su historia y su Nombre.
Era sobreviviente de Aushwitz.
Habia Escrito cuatro libros con su testimonio.
Su nombre es Judith Klein.
Ahora esa cancion ya no era solo una cancion.
Era el Mensaje del Milagro de Januca.
Unos pocos pudieron contra los numerosos.
Los debiles pudieron contra los poderosos.
Si Judith cantaba rodeada de su hijo y de su nieta, quiere decir que otra vez se produjo el Milagro.
Am Israel Jai, estamos aqui y seguimos cantando.
Nes Gadol Haia Sham, Nes gadol Haia Po.