Purim la suerte esta echada o ¿la suerte esta echada?
Todos recordamos que la palabra Pur significa suerte, o echar a la suerte, y en la Meguila el concepto aparece asociado a la pretensión de Aman de definir que dia sería exterminado nuestro pueblo.
La paradoja fundamental de Purim, es que ese día se transformó en un dia de alegria y jubilo y no de destrucción y muerte.
La historia de Purim, de esta manera nos presenta un dilema
¿Somos seres libres o estamos sometidos a los extraños designios de una divinidad manipuladora?
¿La historia esta echada o somos protagonistas de nuestra historia?
En el pensamiento medieval en especial se trabajo el tema de la providencia divina y el libre albedrío.
¿Cómo poder hacer que ambas ideas pueden coexistir?
A simple viste si hay providencia divina, si el futuro esta determinado, no existe libre albedrío, y a su vez, si existe libre albedrío a ultranzas, no podría existir la providencia divina.
Libros se han escrito sobre este tema, y hay autores que le dan mas énfasis a uno de los polos de este dilema, afirmando mas uno u otro.
Maimonides, en uno de los textos que yo particularmente mas disfruto de su escritura, es uno de los defensores hasta las ultimas consecuencias del libre albedrío, sosteniendo en Hiljot Teshuva, en el capítulo 5 lo siguiente:
Que no se te pase por la cabeza aquello que suelen decir los necios de las naciones del mundo y los ignorantes de Israel, al sostener que el Santo Bendito decreta desde la creación de todo hombre si será justo o malvado…
No es esto así, sino que todo hombre tiene la posibilidad de ser (tan) justo como Moshé Rabenu, o (tan) malvado como Ierabaam, o sabio o corto de genio, o piadoso o cruel, o avaro o generoso, y así con todas las cualidades. Y no hay quien lo obligue, ni quien decrete, ni quien lo empuje hacia alguno de estos dos caminos, sino que él por su cuenta se dirigirá hacia el camino que desee….
Y si Dios decretará sobre el hombre el ser justo o malvado; o si hubiera algo (en su naturaleza) que empuje al hombre desde el principio de su existencia hacia algún camino, o percepción, o cualidad, o acción, tal como elucubraron en sus corazones los necios que atienden a los astros...¡¿Cómo podría habernos ordenado a través de los profetas ‘Hagan esto’ o ‘No hagan aquello’?! ¡¿‘Mejoren su andar’ o ‘No vayan detrás de su malignidad’?! (¿Qué sentido tendrá todo esto) si a él (en realidad) ya se le decretó así desde su propia creación, o su naturaleza lo empujara hacia algo que no pudiese evitar? ¿Qué sentido tendría toda la Torá (si esto fuera así)?
Por lo tanto para Maimónides el libre albedrío es uno de los principios fundamentales de nuestra tradición, afirmar lo contrario seria entender al ser humano como a un robot, y la Tora , Jas jelalia, carente de todo valor.
Entonces ¿la suerte esta Echada? La lectura de meguilat Ester nos demuestra que D-s, que esta oculta durante todo el relato, permite a los personajes ejercer su libertad, pero esa libertad finalmente sirve para un plan divino, que es la Gueula.
Cada uno de nuestros actos de uno u otra manera deben contribuir a ese plan divino, que podemos avanzar o retrazar según nuestras propias elecciones, personales y sociales.
Purim Sameaj.
Rab Alejandro S. Bloch
Publicado originalmente en la Revista Shalom
