Tuesday, May 29, 2007

Beaalotja.5767

Hace mas o menos 25 años fue cuando por primera vez prepare un Dvar tora sobre esa parasha.
Estudiando la Parasha, mi Rab me hizo notar que Rashi en el comienzo de la parasha misma nos dice en nombre de los Jajamim que delante de la Menora había un pequeño escalón, y que cuando Aaron encendía la Menora debía elevarse para encender las luces y que estas a su vez irradien su luz.
Aaron debía prepararse para cumplir con esta Mitzva, debía poner Kavana, toda su intencionalidad ya que su tarea era prender una luz que refleja la luz del creador.
Con el correr de los años aprendí otro Midrash con el que nuestros Jajamim nos regalan una perla de su genialidad y nos abren los ojos sobre la relación de esta sección con la Anterior, Naso.
La ultima parte de Naso nos describe la ofrenda que cada uno de los Nessim, los Lideres de las tribus llevaron para la inauguración del Mishkan, parasha que justamente la volvemos a leer durante los días de Januca.
En nuestra sección se habla de una Mitzva que solo Aaron, y quien luego ocuparía su lugar estaban ordenados a realizarla, el encendido de la Menora.
Nuestros Sabios buceando en el texto dicen que esto se debió a que Aaron viendo que cada no de los Nessim traían su ofrenda se puso celoso ya que el estaba excluido de ese ritual.
Hakadosh Baruj hu quiso que Aaron no quede atrapado por los celos y por eso le dio una Mitzva que solo el podía hacer.
Mas allá de lo anecdótico de los celos, me pareció muy profunda la idea de que hay mitzvot que tienen una conexión especial con cada uno de nosotros, y que debemos descubrir cual es. Un ejemplo de esto es una familia de la comunidad de Mendoza que tomo para si misma con gran alegría poder cumplir la Mitzva de Hajnasat Orjim, la hospitalidad, y todo visitante o todo aquel que no tenga donde pasar Shabat y las festividades siempre tienen un lugar en la mesa de esta familia.
Uniendo ambas enseñanzas me gustaría que podamos pensar en este Shabat cual es esa mitzva que nos está esperando especialmente a cada uno de nosotros para que con su cumplimiento con verdadera Kavana y Simja, con intensidad y alegria nos elevemos trayendo algo de luz a nuestro mundo.