Ir saliendo,
no es lo mismo que ir entrando
Siempre es distinto
Siempre tiene otro ritmo
Ir saliendo tiene sabor agridulce
Ese sabor de lo que uno deja allí en el fondo
De un desgarro, tal vez invisible
De aquello que seria pero que nunca fue.
Del enamoramiento que dura un instante,
O que fue eterno pero ya se olvido.
Ir saliendo es estar en medio de dos torbellinos,
el que se deja atrás y el que espera adelante su turno
uno conocido, el otro un abismo
uno real, el otro imaginado
Aun así ,
ir saliendo no es lo mismo que ir entrando ,
uno se lleva consigo, imágenes, sensaciones, rostros, voces ,
paisajes, aromas, consejos y todo lo que el cargamos en la propia mochila,
y la experiencia
y la vivencia,
y los años que se suman,
y los aprendizajes.
Solo se dejan atrás los minutos, las horas, los días y semanas
Los desvelos y alguno de los sueños.