Thursday, December 25, 2008

Januca 5769. El milagro de januca que vivi.

Mucho se ha escrito sobre el milagro de Januca.
algunos ponen el acento en el Aceite.
Otro en la Fe de los macabim,que encendieron la Menora aun sabiendo que el aceite duraria solo para un dia.
Hay otro milagro mas, que se menciona en las brajot que agregamos durante los dias de januca.
Se habla de los pocos que pudieron enfrentar a los Numerosos, los debiles contra los poderosos.
En oportunidad del encendido de la segunda vela de januca, fui testigo de ese milagro.
En el Condominio Carmel, en Vitacura fui invitado a la celebracion de Januca.
Alli gran parte de los residentes son de origen Europeo y de edad avanzada.
Despues del encendido de la janukia, con el acompaniamiento del Acordeon comenzamos a cantar Shirim de Januca y otros muy populares.
Los adultos mayores , acompaniaban con palmas y risas.
Dentro de ellos una mujer en particular que conocia hace algun tiempo, y que en la festividad de Sucot que lleno de emocion ya que corrio a tomar los Arbaat haminim e hizo la braja con verdadera kavana, comenzo a cantar y a bailar desde sus propio asiento.
Minutos antes la habia saludado y le comente a su hijo y a su nieta que estaba a su lado lo que habiamos vivido en Sucot.
Ahora ella cantaba con las mejores de las sonrisas.
Cantaba una cancion Hungara.
Alguien me conto su historia y su Nombre.
Era sobreviviente de Aushwitz.
Habia Escrito cuatro libros con su testimonio.
Su nombre es Judith Klein.
Ahora esa cancion ya no era solo una cancion.
Era el Mensaje del Milagro de Januca.
Unos pocos pudieron contra los numerosos.
Los debiles pudieron  contra los poderosos.
Si Judith cantaba rodeada de su hijo y de su nieta, quiere decir que otra vez se produjo el Milagro.
Am Israel Jai, estamos aqui y seguimos cantando.
Nes Gadol Haia Sham, Nes gadol Haia Po.

Kislev 5769.La reina (del Pop) Ester (Madona) visitó Santiago

Después de haber conmovido Buenos Aires, la reina del Pop está en Santiago.

Mucha gente pagó fortunas por conseguir sus entradas y algunos hasta durmieron más de una noche en la fila para tener un lugar privilegiado.

Madona es un icono de la cultura de masas.

Siempre al límite, siempre moviéndose en los márgenes de las convenciones establecidas, siempre empujando un poco más para escandalizar, hacer pensar y por sobre todas las cosa, haciendo lo que es su verdadero negocio, entreteniendo.

Hace algunos años nos mostró un aspecto más de su personalidad multifacética.

Se puso a estudiar Kabala, y adoptó el nombre nada mas ni nada menos que de una reina, la Reina Ester.

Es interesante que nuestros sabios nos señalan que el nombre Ester tiene en su raíz la palabra “oculto” y en el libro de Ester, D´s está ausente, o mejor dicho justamente oculto.

¿Qué la llevó a Madona y a miles de personas más a explorar la Kabala?

Esta mujer que vendió miles de discos cantando Material Girl, seguramente entendió que no basta comprender el mundo en términos materiales, ya que las cosas mas importantes no son las que medimos pesamos o contabilizamos.

El mundo de acuerdo a la kabala es sólo una alusión, y que por debajo de nuestras percepciones existe una chispa divina que debemos descubrir.

Nuestra milenaria tradición nos enseña que el mundo tiene un significado más profundo que debemos develar y que está más allá o más profundo que el mundo material.

Tal vez en su gira, la reina del Pop pueda hacernos recordar que el judaísmo tiene un gran tesoro que espera que los descubramos.

Les dejo una de las versiones del hermoso cuento que se le atribuye al rabi Najman de Bratzlav.



Había una vez un hombre pobre, un judío temeroso de D's, que vivía en la ciudad de Praga.

Una noche, el hombre soñó que debía viajar a Viena. Allí, él encontraría un tesoro que había sido enterrado debajo de un puente que conducía al palacio del rey.

Noche tras noche el sueño se iba haciendo recurrente hasta que el hombre decidió dejar a su familia y emprender el viaje a Viena en busca de la fortuna. Encontró, efectivamente, el puente de sus sueños, mas éste estaba fuertemente custodiado. Los soldados del rey le dejaban poco margen para lanzarse a la búsqueda del tesoro y el hombre pasó días esperando a que se le presentase una oportunidad.

Dos semanas más tarde, uno de los guardias lo tomó de la solapa al pobre judío y vociferó: ”¡Judío! ¿Qué estás tramando? ¿Por qué vuelves día tras día a este lugar?”

Frustrado, el judío le confesó la historia acerca de su sueño. Cuando hubo finalizado de relatarla, el soldado estalló en una carcajada.

El pobre judío lo miró azorado, sin entender su actitud. Luego, el guardia real dijo: “¡Qué tonto eres! Si yo me dejara guiar por mis sueños, ya estaría en camino a la ciudad de Praga. Justo anoche soñé que un pobre judío de esa ciudad tenía, enterrado en su sótano, un tesoro que esperaba ser descubierto”.

El judío retornó a su hogar, cavó en su sótano y halló el tesoro. Reflexionando más tarde se decía a sí mismo: “Pensar que el tesoro siempre estuvo en mi poder pero tuve que viajar a Viena para enterarme de ello”.

Publicado Originalmente en bneisrael.cl